Las ZBE de España podrían desaparecer

Gonzalo Fernández
Redactor
Publicado en 15 julio, 2025
Todo sobre las ZBE de España

Las Zonas de Bajas Emisiones surgieron en Europa como una medida clave para mejorar la calidad del aire de las ciudades y combatir la contaminación. Francia, que fue el primer país en implantar estas medidas, sorprendió recientemente al resto de países eliminando todas las ZBE que tenía establecidas en sus principales ciudades, desencadenando un intenso debate social y político.



Este nuevo giro plantea la pregunta de si las ZBE en España podrían seguir el mismo camino dado el creciente debate sobre la equidad de estas medidas y el malestar social que generan entre quienes no pueden permitirse un vehículo nuevo o con etiqueta ambiental.

¿Por qué se han eliminado las Zonas de Bajas Emisiones en Francia?

Francia fue uno de los primeros países en implementar las Zonas de Bajas Emisiones (Zones à Faibles Émissions) en el año 2019, comenzando por ciudades como París, Lyon o Grenoble,empezarona restringir el acceso de vehículosconsiderados altamente contaminantes a determinadas zonas.

En el 2021 se reforzaron estas medidas con la aprobación de una nueva ley que obligaba a todas las áreas urbanas de más de 150.000 habitantes, a establecer una ZBE si se superaban los límites de contaminación previstos.

Sin embargo, las Zonas de Bajas Emisiones de Francia fueron eliminadas en la primavera de 2025 tras una iniciativa conjunta de varios partidos, generando un importante impacto a nivel nacional e internacional ya que el país ha pasado de ser un referente en movilidad sostenible, a dar marcha atrás de forma tan drástica y repentina.

Los motivos principales que sustentaron esta eliminación han sido:

  • El impacto social y económico desproporcionado. Se alegó que las ZBE de Francia penalizaban especialmente a aquellos ciudadanos con menos recursos al impedirles circular con sus vehículos más antiguos sin ofrecerles unas alternativas económicas viables. Muchos no podían comprar un coche eléctrico o un coche híbrido ni acceder fácilmente al transporte público.

  • Percepción de medida elitista o “clasista”. Una gran parte de la ciudadanía veía estas zonas como una forma de segregación urbana en la que sólo quienes tienen vehículos nuevos y caros pueden circular sin problemas. Este discurso caló especialmente en las zonas rurales y de la periferia donde coger un coche es la única forma de movilidad.

  • Aplicación sin alternativas reales. Una de las principales críticas fue que, antes de restringir el uso de vehículos, no se había reforzado el transporte público ni se habían ofrecido alternativas de movilidad accesibles para toda la población. La medida se percibió como poco realista en contextos donde el coche sigue siendo imprescindible.


Uno de los objetivos de las ZBE es reducir la contaminación